Esta receta de tarta red velvet es fácil, deliciosa e irresistible. La había probado muchas veces, pero nunca me había atrevido a hacerla, hasta que quise regalársela a mi madre por su cumpleaños. Fue todo un éxito y por eso la quiero compartir con vosotros.
En el paso a paso de la tarta red velvet, especifico que el colorante tiene que ser de pasta roja, ya que si le pones los tubitos líquidos rojos que venden en cualquier supermercado, no te saldrá roja, sino que tendrá un color marrón rosáceo debido al cacao. Si no encuentras la pasta, puedes quitar el cacao de la elaboración y así, al ser el bizcocho blanco, coja más el color rojo de los líquidos de colorante.
Otro consejo que os doy para realizar esta tarta red velvet, es que dejéis enfriar bien las elaboraciones, ya que si el bizcocho no está frío al cortarlo, se puede romper. E incluso, al ponerle el relleno este puede derretirse.
¿Qué tipo de moldes usar? Hay quienes para esta red velvet utilizan 2 moldes de 20 cm o 3 de 18 cm. Yo empleo 2 moldes de 18 cm y los divido en dos, así me quedan 4 pisos y hacen que mi tarta sea más alta. Para cortar los bizcochos uso una lira de repostería, de esta forma salen bien nivelados, pero podéis usar un hilo o un cuchillo haciéndolo con más precisión.
Con estos consejos, y siguiendo la receta de la tarta red velvet que hay a continuación, seguro que te sale un bizcocho jugoso y húmedo, que mezclado con el toque de queso de su relleno y el mascarpone de la cobertura, harán cada bocado único.
Si prefieres un bizcoche con toques de limón muy jugoso e irresistible, aquí tienes la receta de un riquísimo plum cake de limón.
Tarta red velvet
Equipment
- Horno
- 2 moldes de 18 cm
- Batidora de varillas
Ingredientes
- 120 ml de aceite suave
- 320 g de azúcar
- 2 huevos M
- 2 cdas de cacao en polvo (preferible sin azúcar)
- 1 cda de colorante en pasta rojo Tiene que ser pasta porque si es líquido colorante te quedará un color marrón. En caso de no encontrarlo, porque en los supermercados no está, no le añadas el cacao.
- 3 cditas de vainilla en pasta
- 250 ml de leche entera
- 2 cditas de zumo de limón
- 1 cdita de bicarbonato sódico
- 2 cditas de vinagre blanco
Relleno
- 125 g de mantequilla sin sal pomada
- 300 g de azúcar glas
- 125 g de queso crema
Cobertura
- 300 g de queso mascarpone
- 200 g de azúcar glas
Elaboración paso a paso
- Lo primero será mezclar el zumo de limón con la leche. Dejamos reposar al menos 10 minutos. Aparecerán grumos, es lo que buscamos.
- Engrasamos los moldes (yo usé 2 de 18 cm). Mezclamos la harina y el cacao y lo tamizamos.
- Precalentamos el horno a 180°.
- Comenzamos batiendo los huevos y el azúcar hasta que la mezcla sea blanquecina. Luego añadimos el aceite poco a poco mientras seguimos batiendo.
- Batiendo a velocidad baja, añadimos la harina y el cacao y vamos alternándose con la leche.
- Agregamos el colorante rojo y la vainilla y volvemos a batir.
- El último paso será mezclar el vinagre y el bicarbonato en un vasito, cuando empiece a burbujear lo añadimos al bol con el resto de ingredientes. Mezclamos.
- Sin esperar mucho, repartimos la masa en los dos moldes y horneamos entre 25-30 minutos. Pichar con un palito antes de sacarlo, si sale limpio es que está listo.
- Dejamos enfriar sobre una rejilla y mientras preparamos la crema de queso que irá en el interior.
- Batimos la mantequilla pomada, el azúcar y el queso hasta que esté bien integrado. No os paséis batiendo. Reservamos en la nevera.
- Para la cobertura mezclamos , sin batir, el mascarpone y el azúcar. Reservamos en la nevera.
- Una vez los bizcochos este fríos los cortamos por la mitad y les cortamos la parte de arriba a cada uno, así serán planos. Rellenamos con la crema de queso intentando equilibrar las capas. Con lo que sobra lo ponemos por fuera, al igual que la cobertura de mascarpone.
- Decoramos con frutos rojos y rallamos un poco de los trozos de bizcocho que cortamos.
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